Es indignante y lamentable cómo los diputados de ultramar, especialmente los de la Circunscripción #1, muestran su falta de empatía y compromiso hacia los dominicanos que residen fuera del país. Suben a las redes sociales imágenes de la repartición de juguetes en diferentes pueblos de la República Dominicana con motivo del Día de Reyes, como si en su propia demarcación no existieran niños que también necesitan una mano amiga y un poco de alegría.

¿Acaso olvidan que fueron elegidos para representar y velar por el bienestar de los dominicanos que vivimos en el exterior? ¿Dónde queda el apoyo a las familias que confiaron en ellos para mejorar nuestra calidad de vida?

Esta acción no solo es una falta de respeto, sino una burla descarada hacia todos nosotros. Mientras tanto, algunos justifican lo injustificable, como si fuera aceptable ignorar las necesidades de nuestra comunidad. Pero que les quede claro: no olvidaremos esta falta de consideración y acción hacia quienes los eligieron.

Ya basta de políticos sin escrúpulos que juegan con las esperanzas de la diáspora. Los dominicanos de ultramar merecemos respeto, atención y justicia.